
Aún está por ver si el proyecto de ocio y juego de Hard Rock se acaba materializando en la Costa Daurada pero los municipios de Salou y Vila-seca luchan por incrementar su cuota sobre los impuestos que deberían recaudar al complejo.

Donde no están de acuerdo es en el reparto de los ingresos fiscales que va a generar este centro recreativo. Generalitat y Vila-seca han votado a favor de la nueva propuesta de redistribución de los impuestos locales derivados de la actividad económica de Hard Rock. La distribución de los ingresos fiscales será del 59,35% para el ayuntamiento de Salou y del 40, 65% para el de Vila-seca. Salou ha votado en contra y defiende que este reparto se acordó en 2013 por todas las partes y ese acuerdo está vigente hasta 2032.
La Generalitat está intentando aprobar esta actualización de la distribución de los ingresos siguiendo la recomendación de un informe jurídico al que el Ayuntamiento de Salou se opone frontalmente.



