Turismo volcánico, el Hawái de Europa
La isla de La Palma ha recibido en un fin de semana unos 10.000 turistas atraídos por el volcán Cumbre Vieja que lleva mes y medio en erupción. Los vuelos y barcos con destino a la isla han quedado prácticamente completos.

La Palma necesita que el turismo esté activo porque una parte muy importante de la isla vive de los visitantes y necesita que vaya el turismo. Las autoridades quieren que la economía siga activa y se encuentra ante la dificultad de hacer confluir los mensajes de precaución y seguridad de la población con la llegada de visitantes.
Con la erupción del volcán los alojamientos turísticos están recibiendo reservas medias de 2 o 3 noches, lejos de las reservas de una semana que era habitual. Los turistas buscan inmortalizar el espectáculo natural desde alguno de los miradores que estos días están recibiendo muchos curiosos, especialmente por las noches, cuando la visión de las coladas es más impactante.
Algunas voces ya se preguntan si La Palma se convertirá en el Hawái de Europa.



