El pasado mes de junio, el nuevo presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Joan Canadell, tomaba posesión del cargo y, a su vez, asumía la presidencia del consorcio público-privado Turisme de Barcelona –cargo que por estatutos le corresponde al presidente de la Cámara-. Canadell, ajeno al mundo del turismo, encabezó una candidatura empresarial independentista apoyada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y se mostró muy dispuesto a ejercer activamente al frente del organismo de promoción.
El sector turístico se mostró preocupado por la deriva que podía tomar la entidad, controlada por el Ayuntamiento y la Cámara de Comercio. Hasta la llegada de Canadell, la presidencia del organismo de promoción turística de la ciudad la había ostentado el hotelero Joan Gaspart durante 26 años. En julio, Turisme de Barcelona empezaba su capítulo particular de Juego de Tronos, una lucha de los empresarios turísticos por recuperar posiciones ante un presidente alejado del sector, con marcado perfil político y con posiciones poco coincidentes con el empresariado turístico.
La estrategia de los hoteleros barceloneses pasaba por negociar con el nuevo presidente de la Cámara. En las pocas intervenciones públicas de Canadell vinculadas al turismo quedó en evidencia su desconocimiento del sector y su actividad. Este empresario fundador de gasolineras Petrolis Independents entendía que no podía presidir una agencia dedicada a una materia que desconoce y en contra de las empresas que en principio representa.
El Gremi d’Hotels de Barcelona cerró a finales de septiembre un pacto con él. Los hoteleros se adjudicarían la última silla de pago del pleno de la Cámara de Comercio a cambio de la presidencia de Turisme de Barcelona.
El 31 de octubre, Joan Canadell anunció que pasaba su presidencia en el comité ejecutivo de Turisme de Barcelona a Eduard Torres, vicepresidente del Gremi d’Hotels de Barcelona. Torres es consejero delegado del Hotel Duquesa de Cardona en la capital catalana y cuenta además con otros dos establecimientos en la provincia.
Junto a la presidencia de Torres, al frente de Turisme de Barcelona se encuentra Xavier Marcé, concejal del PSC, que actúa como nuevo vicepresidente en representación del Ayuntamiento. Turisme de Barcelona cuenta con un presupuesto que supera los 54 millones de euros y su director general es Joan Torrella, responsable de la gestión diaria del organismo.
